Agitando su cabeza, se dirigió a la puerta de la habitación de Sara. "Mierda".
Como él caminó en el pasillo, los dos lo escuchó recoger sus zapatos, hacer un par de comentarios y malhumorado pisar por las escaleras. A medida que escuchó la puerta estrecha a continuación, Sara se dirigió a Tiff y mantuvo su botella de cerveza. Tiff clinked la suya en contra de ella.
"Cheers", dijo Sara.
"Su atención por favor", pidió el sistema de altavoces. "Vuelo 713 es de 30 minutos en su enfoque plazo. ¿Podría todos los pasajeros en espera de vuelo 713, por favor hacer su camino a la puerta de embarque de cinco años. Eso es cinco puerta de embarque para todos los pasajeros del vuelo 713."
Sacudido de su ensoñación, y sentir un poco húmeda de su memoria erótica de los últimos minutos, Sara mirada más en el trío en el oscuro rincón del salón. Ahora, como la rubia besó la hunky tipo, observó que la morena fue la mano debajo de la mesa, al parecer su Catación pelotas a través de su jeans, ya que en él sonrió.
Maldición, pensó Sara como ella recogió su bolso y cavaron algunas facturas a pagar por sus bebidas, hablar en el día. Algunas cosas nunca ha cambiado, supongo que ella, sonriendo para sí tanto el cantinero le pregunta qué estaba pensando de.
Como él caminó en el pasillo, los dos lo escuchó recoger sus zapatos, hacer un par de comentarios y malhumorado pisar por las escaleras. A medida que escuchó la puerta estrecha a continuación, Sara se dirigió a Tiff y mantuvo su botella de cerveza. Tiff clinked la suya en contra de ella.
"Cheers", dijo Sara.
"Su atención por favor", pidió el sistema de altavoces. "Vuelo 713 es de 30 minutos en su enfoque plazo. ¿Podría todos los pasajeros en espera de vuelo 713, por favor hacer su camino a la puerta de embarque de cinco años. Eso es cinco puerta de embarque para todos los pasajeros del vuelo 713."
Sacudido de su ensoñación, y sentir un poco húmeda de su memoria erótica de los últimos minutos, Sara mirada más en el trío en el oscuro rincón del salón. Ahora, como la rubia besó la hunky tipo, observó que la morena fue la mano debajo de la mesa, al parecer su Catación pelotas a través de su jeans, ya que en él sonrió.
Maldición, pensó Sara como ella recogió su bolso y cavaron algunas facturas a pagar por sus bebidas, hablar en el día. Algunas cosas nunca ha cambiado, supongo que ella, sonriendo para sí tanto el cantinero le pregunta qué estaba pensando de.
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